¿Quien fue Derlinda Araya?

La pregunta la hace el profesor Enrique Ugalde Santos referida a la creadora del Vals de Ovalle,  transformada en un verdadero himno de la ciudad en las últimas décadas. Sin embargo pocos  saben de su creadora una “cantora” nacida en Chañaral, y que recorrió el país con su guitarra.
“En la década del 60- 70 escuchamos por primera vez esos compases interpretados por el funcionario del hospital y músico excelente, Augusto Fajardo, quien promovía de esa manera el cariño a su tierra.
Mucho después el profesor y folclorista Edio García Galleguillos  la incorporaba a su repertorio y la difundía en congresos en el norte y sur del país.Pasado un tiempo la Municipalidad de Ovalle (N. de la R.: durante la administración del alcalde Rodrigo Sugg Pierry) la grabó y usó como “cuña” en “jingles”  y promoción de festivales y certámenes culturales- sociales, y para ello la primera en grabarlo fue Susana Ramírez, artista ganadora de muchos festivales…Y así fue conociéndose y aprendiéndose masivamente hasta ahora “, agrega Ugalde Santos en su libo “Contando y Cantando a Ovalle”.
El autor reproduce textual  del libro “Panorama espiritual de una Provincia”, del escritor de la Tercera Región, Benigno Avalos Ansieta:

“ Derlinda Araya, también artista Chañaralina. Se sintió fuertemente atraída por el folklore de la zona central. Hace unas décadas recorría el país con conjuntos de variedades, acompañada de su alegre guitarra. En sus interpretaciones de cuecas y tonadas, propias y ajenas, derlinda  sacaba a relucir su fibra, su gracia picaresca. Falleció a una edad relativamente joven, y sus canciones originales, por desgracia, han caído en el olvido. Al parecer no dejó grabaciones ni música impresa”, concluye don Benigno Avalos.

El periodista e investigador Lincoyán rojas Peñaranda, por su parte, precisa que la autora del Vals de Ovalle, falleció en 1960.

REGISTROS Y GRABACIONES
Sin embargo, contrariamente a lo que señala don Benigno Avalos y reproduce Enrique Ugalde,  en los archivos de musicología de la Universidad de Chile están disponibles para los investigadores partituras de algunas de sus obras originales. Por ejemplo la obra de”10 Creaciones de la Cantante Típica Chilena”. “Composiciones y creaciones en las radios chilenas”. Con los temas :  recuerdos de ausencia  , lirios chañaralinos, pa qué le voy a contal.: ..t’i acordai ; agüita e toronjil,  amores campesinos,  a una dama recuerdos de ausencia y chilenita. Lamentablemente no está el Vals de Ovalle.

En tanto que un trabajo “La geografía de la música popular tradicional en el Chile a mediados del siglo XX, del profesor Claudio Rolle, del programa de Estudios Histórico Musicológicos de la Pontificia Universidad Católica de Chile, refuta que no hubiere registros fonográfico de sus obras.“Sin embargo la industria discográfica había aportado un importante impulso al consumo de música chilena generando registros desde temprano y promoviendo su consumo por diversas vías. La producción fonográfica se
había iniciado informalmente en el país con la grabación en cilindros de cantoras de fondas y casas de canto, de modo que desde sus inicios, la industria discográfica recurrió a la música tradicional chilena para alimentar sus
producciones. (…)
La industria del disco intervino y contribuyó a preservar los nombres de las tres folkloristas chilenas que más grabaron en el acetato y cuyas voces salieron en las ondas radiales de las décadas de 1930 y 1940. Ellas fueron Derlinda Araya, Esther Martínez, y Petronila Orellana. La labor discográfica y radial de estas folkloristas aumentó los grados de masividad del folklore chileno en las décadas de 1930 y 1940, contribuyendo a la consolidación de un público y de una demanda desde la ciudad para la música del campo”.